Rozando Argelia.
Un día de descanso en medio de la nada. No parece una buena idea.
Escrito por Javier (Navegante), fechado el 16 de noviembre de 2022.
No había prisa, me decía, mientras me desperezaba entre las rígidas sabanas del recio catre del campamento. Como es normal, ir al baño era todo un poema, había que vestirse para no enfriarse en el camino a las letrinas, la ducha y el posterior aseo bucal. Volví a mi haima, termine por repasar la ropa y demás enseres, comprobar la carga de los dispositivos electrónicos y medio colocarlo todo, esa noche saldríamos del campamento y tenia tantas ganas de abandonarlo, que ya antes del desayuno casi tenia preparada la bolsa de hule para el furgón de la organización y el baúl para Ligera.
El desayuno se prolongo mas de lo habitual y entre charlas y risas dimos tiempo al sol a colocarse bastante alto en el cielo azul de una mañana aún fresca. El brifing se produjo y las escusas de los responsables de la organización, la verdad no me consolaron, seguía bastante "cabreado", pero al menos estaba más tranquilo que el dia anterior, era hora de hablar con el organizador y al menos exponerle mis pensamientos.
Me dirigí a Tony, con el ceño fruncido, señal inequívoca de mi enorme disgusto y comenze a decirle mis sensaciones, me parecía increíble la situación del momento, no podía creer que la organización bien de Hummer Raids bien de BMW hubiera consentido esto. Se nos dijo que un responsable de los Hoteles Xaluca vendría a darnos sus explicaciones, si se presento, al menos yo no lo vi y no me moví del campamento en todo el día, salvo para dar un paseo del que habrá tiempo más tarde para relatar. Tuvimos un momento de tensión, cuando le dije que me sentía "estafado", que había pagado 600 EUR por una habitación individual para precisamente no compartir habitáculo ni baño ni aseo ni ducha ni nada de nada.... Parece que la palabra "estafa" no le gusto mucho y la verdad es que me di media vuelta y me fui, si que tenia una cosa clara, no se devolvía el dinero por tener que compartir letrinas, parece que eso si importaba.
Unos minutos más tarde se presento Tony con el responsable de marketing de BMW, Jorge. Fuimos los tres a un apartado del campamento y allí pudimos decir lo que pensábamos. Por una parte, Jorge me pudio disculpas, igual que mi amigo Tony, a veces pensamos que no se puede discutir con un amigo, pero no es verdad, todos cometemos errores y lo mejor es aclararlo cara a cara. Intentare ser breve, Jorge me expuso que a ellos les habían "estafado", esto me encendió un poco y les dije:
- Es curioso como viniendo de tus labios la palabra "estafa", entendemos todos lo que has dicho y lo que significa pero, si lo digo yo, no parece la misma palabra. Desde luego yo también me siento así.
Tony me propuso llevarme a un hotel en este mismo momento, ambos estaban de acuerdo en esta proposición, una mirada vale por muchas palabras, con los ojos húmedos les conteste que no deseaba ser más que ninguno de mis compañeros, que me perecía increíble que la organización no hubiera revisado el campamento antes de llevarnos a el, que un día de descanso en medio del desierto no es más que una perdida de tiempo absurda, no puedes ir a dar un paseo por el pueblo sin sacar la moto, que de todas las malas ideas, la pero es pasar dos noches en estas circunstancias.... Sobre todo no entendía como BMW podía cometer este error tan garrafal. La verdad es que ambos estuvieron en consonancia con mis exposiciones, después de una largo rato, nos dimos un abrazo y nos separamos. Por mi parte había dicho lo que pensaba y me sentía mejor.
Decidí acercarme a la tienda y coger la camara 360 que estaba probando para la ocasión, aún deberia aprender mucho de como sacarle partido, para dar un paseo por los alrededores del campamento. Antes de esto, salí entre las motos y me fui a ver a mi fiel compañera, Ligera. Estaba revisando las protecciones, algunos tornillos y algunos plásticos, cuando me di cuenta que el pasador del reposapies del pasajero estaba casi fuera de su sitio, aparecían casi 2 cm por encima del soporte del mismo, mire el lado contrario y también estaba fuera en casi 1,5 cm. Me dirigí hacia los mecánicos y les comente el tema, Jhonny se acerco para verlo y desapareció mientras me decía:
- Espera que ahora vengo.
Volvió a aparecer con dos bridas en las manos y puso una en cada reposapies, cubriendo la cabeza del pasador, de momento evitaríamos perder el pasador y el reposapies. Le di las gracias y marché hacia mi haima.
Cámara en ristre volví a a la explanada donde estaban las motos, y me decidí a grabar mientras andaba. Pase cerca de los mecánicos que estaban liados reparando tapas de cilindro, parabrisas, embragues, en fin heridas de guerra de nuestras GS. Allí estaba el Cata, terminado de colocar la tapa del cilindro izquierdo de su moto, mientras trabajaba me explicó que de una caída se habían doblado los tornillos de la tapa y perdía algo de aceite, que ya había conseguido tornillos que le habían dado los mecánicos del evento y que estaba terminando la faena. Le dejé con su tarea charle un rato con Ángel y Rodrigo que estaban cerca del Cata, mas para azuzarle que para echar una mano, ya se dice que donde hay confianza da asco.
Al otro lado de los mecánicos, por la parte posterior a las tiendas donde habíamos dormido, me haba fijado el día anterior que se erguían tres plantas, arbustos de medio tamaño, con unos dos metros de altura el mayor. Eran de una hojas aparentemente fuertes y había visto que tenían unos frutos como pelotas de tenis, algo mayores. Como no sabia que eran le pregunté a Tony, el conductor del camión de Raid que nos acompaña en los eventos de Marruecos desde el primero allá por el 2017. Me explico que es una planta muy común, que tiene una sabia lechosa que es urticante y por eso los animales no las comen. Ya me extrañaba a mi que los dromedarios no le metieran mano a estos arbustos. He podido saber que se llama Calotropis Procera (comúnmente conocido por mudar de la india o manzano de sodoma o algodoncillo gigante), es un arbusto que llega a medir entre 4 y 6 metros de altura y su savia contiene latex y otras sustancias que provocan quemaduras en la piel. Gracias Tony por tus explicaciones.
Di una vuelta alrededor del campamento y pude observar que la tierra, aparentemente dura, se quebraba al pisarla con cierta fuerza. Realmente estábamos en una especie de playa de arena ocre, con densidades dispares. Allí donde la densidad era alta, se aguantaba bien el peso de una persona, por el contrario en otras el pie se hundía, dejando la huella marcada en el arenoso suelo. Salir de aquí seria delicado mañana, a nuestro favor que la densidad de la arena seria mayor por salir por la mañana, el frio hace que se compacte.
Llegaba la hora de comer y nos reunimos en el haima enorme que hacia las veces de comedor, la organización había preparado la comida de este día, que en principio no estaba incluida en el orden del día. Después de la pitanza, fuimos pasando la tarde entre charlas y algunos se atrevieron a subir a las dunas con las motos, Jorge de Moto Adventure Madrid, nos dio una verdadera lección de como surfear las dunas. Un poco más tarde el otro Jorge, de DasMoto BMW Motorrad Bizkaia, saltaba entre las dunas con un espectáculo a contra sol, que hizo nuestras delicias, ademas de llenarnos de sana envidia.
Entre estos entretenimientos, la música de los bereberes, el chasquido de las lenguas de fuego de la leña que ardía en medio del campamento y los comentarios, dimos con la hora de la cena y del brifing del día siguiente. Después de cenar, un paseo nocturno y para la cama, mañana seria otro día.